Las elevó el legislador José María Canelada con padres de alumnos de las escuelas Zavaleta y del Niño Jesús. Denunciaron que los hicieron tener clases en una cocina, en un pasillo y en depósitos.
Esta mañana el legislador José María Canelada presentó cuatro notas relacionadas a la Educación en Tucumán. Las dos primeras junto a padres de las escuela Fray Pedro Zavaleta y de la escuela especial del Niño Jesús porque no cuentan con edificio propio y ante esta situación a los alumnos los hicieron tener clases en cocinas, pasillos y depósitos.
Además, presentó otras dos, una por problemas edilicios en 40 establecimientos educativos y otra por padres de alumnos que advirtieron que no pudieron inscribir a sus hijos en algunos colegios por no haber tenido dinero para la cooperadora.
«En las escuelas Zavaleta y del Niño Jesús los tienen peregrinando a padres y alumnos con toda la incertidumbre que eso trae y con la dificultad mayor aún que tiene para un niño con discapacidad este tipo de traslados. El estado es de total incertidumbre. Con estos temas nos dirigimos directamente al gobernador Juan Manzur, porque ya hicimos presentaciones formales ante el ministro (Juan Pablo Lichtmajer) que no trajeron tranquilidad a la comunidad», explicó el parlamentario.
Sobre la situación que vive la escuela especial del Niño Jesús una de las madres, Silvana Cheda, contó que se encuentran «vagando» desde el 2018.
«Les han dado clases en una cocina con todo el riesgo que implica, también en una galería. El año pasado estuvimos en la Moreno al 261, con promesas de que en un tiempo breve iba a estar el establecimiento para nuestros hijos. No pasó. En febrero nos dijeron que los iban a trasladar y ayer nos mandaron un mensaje para presentarnos en la Escuela Técnica Juan XXIII. No tenemos edificio propio aunque peleamos desde el 2018 por esto. Pedimos al Estado que se haga presente. Si vos sacás a un niño especial de su ámbito y lo tenés que trasladar a otro, es terrible. Queremos que nuestros hijos dejen de ser los niños fantasmas, que los vean. Todos los años pasa lo mismo, todos los años son mentiras».
A su vez, quiso aclarar informaciones «que están haciendo circular desde el Ministerio. No estamos encaprichados, como dicen. No tenemos accesibilidad en esa zona, tenemos otros hijos que dejamos en otros establecimientos. Hay padres que tienen que salir a las 6 de la mañana y tomarse tres colectivos para llegar a esa zona. Necesitamos que el Estado los vea a nuestros hijos».
Por su parte, por la escuela Zavaleta habló la madre María Tedesqui, quien contó que tuvieron que mudarse el año pasado por un peligro de derrumbe que hubo en su edificio. «Mudaron a los chicos a la Escuela Mitre, a la que le agradecemos porque nos cedieron lugar. Sin embargo, las condiciones de estudio no son favorables. Segundo y tercer grado comparten un pasillo, un aula donde la maestra de segundo habla mientras la de tercero espera en silencio y luego la de tercero da su clase mientras la de segundo calla. Como no había ninguna certidumbre, muchos padres cambiaron a sus hijos. Otros no conseguimos lugar. Nos prometieron un edificio para este año, pero dos días antes de que comiencen las clases nos dijo la supervisora que no soñemos con eso, que el presupuesto era para hacer arreglos, no para alquilar otro edificio. Nuestros chicos están compartiendo en espacios reducidos, son depósitos que tenía la Mitre, algunos no tienen ni ventanas».
Arreglos y pago de cooperadora
En cuanto a la presentación por las 40 escuelas de toda la provincia que tienen problemas edilicios, Canelada señaló que son establecimientos de los que les llegaron denuncias de padres y docentes. «Los docentes nos escriben desde el anonimato y con miedo porque son amenazados de que si cuentan lo que está pasando van a sufrir algún tipo de represalia. De estas escuelas nos informan que tienen roturas en los techos, en las paredes, en los pisos, que no tienen agua, que no tienen el personal necesario de limpieza. Esta es la foto con la que empieza el ciclo lectivo en Tucumán. Nos dijeron que estaba todo fantástico y estas escuelas no están en condiciones».
Por otro lado, aseguró que hay padres que denunciaron no haber podido inscribir a sus hijos. «Nos contaron que les han impedido realizar el trámite de inscripción en algunas escuelas por no haber tenido el dinero para pagar la cooperadora, que se sabe que es un pago voluntario y que no puede poner en juego de ninguna manera el derecho a la Educación. Exigimos que traigan respuestas. Gobernar es resolver problemas. No queremos más dilaciones, no queremos que nos mientan, no queremos que les falten el respeto a los padres, a los niños y a los docentes diciendo que está todo bien, porque no se puede tapar el sol con un dedo. No nos interesa la polémica con el ministro o con el gobernador. Exigimos soluciones, nada más».